La Sala Penal del STJ aún no resolvió la prisión preventiva de Urribarri
Desde hace más de una semana, la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia tiene en sus manos la resolución de la impugnación extraordinaria a la prisión preventiva de Sergio Urribarri y su cuñado Juan Pablo Aguilera.
Los vocales deben tomar una decisión para la cual no cuentan con plazos, aunque se acostumbra a tomar el margen de 20 días hábiles, y a este 2024 le quedan solo cuatro. Por otro lado, la situación de Báez (que corre por separado) es más complicada y posiblemente pase la feria judicial de enero en la cárcel mientras espera la misma definición. Los tres están más cerca de pasar la Navidad en la Unidad Penal N° 1 de Paraná.
El 19 de noviembre la Cámara de Casación Penal de Paraná dictó la prisión preventiva de los dos condenados por corrupción, haciendo lugar al pedido de la Fiscalía. Luego concedieron la impugnación extraordinaria contra ese fallo que es lo que se discute en el máximo tribunal de la provincia.
La Sala Penal para entender en esta causa quedó integrada por Miguel Ángel Giorgio, Germán Carlomagno y Gisela Schumacher, luego de que le rechazaran a esta última vocal el pedido de excusación por “violencia moral”. Y en ese orden es que deberán ir emitiendo sus votos.
Hay información extraoficial contradictoria acerca del voto de Giorgio: algunos sostienen que aún no emitió su opinión, mientras que otros comentan que lo hizo confirmando la postura de la Cámara de Casación Penal que dictó la prisión preventiva.
Versiones incomprobables en un sistema donde no se publica el movimiento de una causa en esta instancia. En el mismo plano de los rumores, se habla de la posibilidad de una salida intermedia entre la confirmación de la preventiva en la cárcel y la excarcelación, que es la prisión domiciliaria.
Las partes en general consideran clave el voto de Giorgio, ya que se sabe que es un juez que muy ceñido a las garantías constitucionales, al tiempo que se ha diferenciado del juego de otros vocales en el beneficio a Urribarri y otros acusados de corrupción.
Tal fue el caso del recurso extraordinario federal ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación que fue concedido por voto mayoritario de Carlomagno y Schumacher, quienes permitieron no dejar firme la sentencia condenatoria de ocho años de prisión para el exmandatario.
Según la postura de quien fuera anteriormente vocal de Tribunal de Juicio de Paraná, los otros dos vocales podrían adherirse o tener un pronunciamiento diferente. De cualquier manera, el caso sentará una jurisprudencia de relevancia para los tribunales inferiores de la provincia.
El expediente pasó al despacho de Giorgio el viernes 13 de diciembre y, hasta este viernes 20, las partes no recibieron ninguna notificación. Evidentemente no demuestra ningún apuro para votar. Este lunes será hábil, el martes será inhábil y el miércoles es feriado. Por más que Giorgio se pronuncie este lunes, Carlomagno y Schumacher deberían emitir un voto fugaz e insólito para obtener una resolución con respecto a la cuestión de la prisión preventiva en el mismo día.
Luego quedarán solo tres días hábiles para este trámite: jueves, viernes y lunes, por lo cual también debería ser muy veloz el trámite para conocer una sentencia antes de fin de año. Luego se ingresará en el largo descanso judicial de enero, y todavía no se dieron a conocer las autoridades de feria. Habrá que aguardar si se toma la decisión de habilitar o no la feria judicial para resolver la impugnación extraordinaria.
No hay una norma que establezca un plazo para una sentencia del Superior Tribunal de Justicia sobre las impugnaciones extraordinarias. Pero se acostumbra a adoptar los 20 días hábiles que tiene la Cámara de Casación Penal. En tal caso, también hay margen para llegar a febrero.
La situación de Pedro Báez es más complicada aún por los tiempos y es casi seguro que recién en febrero tenga una resolución sobre la impugnación a la prisión preventiva. Es que la medida cautelar con respecto al exministro de Cultura y Comunicación corre por separado y recién la semana pasada Casación, en un plazo bastante rápido, concedió el recurso para que la Sala Penal la confirme o la revoque.
El expediente llegó a la Sala Penal, que corrió vista a los defensores, quienes argumentaron rápidamente para revocar la prisión preventiva y renunciaron a los plazos procesales. Al Ministerio Público Fiscal le corrieron vista el viernes con el plazo de cinco días hábiles para responder. Y antes de fin de año los días hábiles que quedan son cuatro, por lo cual tienen tiempo hasta el primer día hábil de febrero. Y desde ese momento, ingresa recién a despacho de los vocales del STJ.