Un reciente informe, elaborado con los resultados de las pruebas Aprender, advierte sobre los problemas de aprendizaje en diversos contenidos. En el nivel primario, casi la mitad de los alumnos no alcanza los niveles mínimos de conocimiento. Además, ocho de cada 10 estudiantes de secundaria no logran los saberes esenciales en Matemática, obteniendo las calificaciones más bajas en la evaluación nacional en materia educativa.
Estos hallazgos provienen del trabajo titulado “¿Qué aprendimos de Aprender?”, realizado en colaboración entre el Observatorio Argentinos por la Educación y Educar 2050, con la autoría de Alejandro Ganimian y Verónica Mesalles.
El estudio presenta un diagnóstico detallado a partir de los datos recabados sobre el rendimiento de los estudiantes de primaria (3°, 4° y 6° grado) y secundaria (2°/3° año y 5°/6° año, según la jurisdicción) en los 24 distritos del país (23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires).
Diagnóstico alarmante
El informe aborda varias cuestiones a partir de los datos obtenidos de las pruebas Aprender entre 2016 y 2023. El diagnóstico sobre el estado de los aprendizajes es alarmante, ya que el porcentaje de estudiantes en los niveles más bajos de rendimiento aumentó en casi todas las asignaturas y grados/años desde 2016, con excepción de lengua en 5°/6° año.
En todas las materias y niveles se observó un incremento en la cantidad de alumnos que no logran los conocimientos mínimos en áreas como Lengua, Matemática, Ciencias Sociales y Ciencias Naturales.
Por ejemplo, en 6° grado, entre tres y cinco de cada 10 alumnos se ubican en el nivel básico o por debajo de él, según la materia. La situación es aún más grave en Matemática, donde se constató que la mitad de los estudiantes no supera los niveles esperados de aprendizaje.
“El operativo Aprender ha tenido diversos logros, entre ellos, lograr la previsibilidad de las asignaturas y grados a evaluar cada año. Para mejorar su utilidad como herramienta de decisión, es fundamental perfeccionar algunos aspectos técnicos, como la cobertura y la comparabilidad a lo largo del tiempo. A pesar de estos puntos pendientes, el escaso avance en los resultados de calidad y equidad debería generarnos preocupación”, señaló Alejandro Ganimian, experto en estadística educativa (Escuela de Educación de Harvard/Universidad de Nueva York).
Si observamos los datos de los estudiantes de secundaria, la proporción que no alcanza los aprendizajes mínimos es aún mayor. En el nivel de 5°/6° año, entre cuatro y ocho de cada 10 estudiantes se ubican en el nivel básico o por debajo de él, dependiendo de la asignatura. En Matemática, la situación es nuevamente crítica: ocho de cada 10 alumnos se desempeñan en los dos niveles más bajos de la prueba Aprender.
La preocupante situación también quedó reflejada en pruebas internacionales sobre el nivel de los aprendizajes de los estudiantes argentinos. En las evaluaciones latinoamericanas, cerca de la mitad de los alumnos de 3° grado, y entre cuatro y ocho de cada 10 de 6° grado, se ubican en los niveles más bajos.
Por otro lado, en las pruebas internacionales, entre cinco y siete de cada 10 estudiantes de 2° y 3° año no logran alcanzar los estándares mínimos de desempeño. Lo sorprendente, según el informe, es que ambos porcentajes superan los porcentajes de estudiantes en los niveles más bajos de las pruebas Aprender.
El nivel de excelencia en educación, con menor porcentaje.
El diagnóstico negativo se ve reforzado por la escasa cantidad de estudiantes que alcanzan aprendizajes de excelencia, un grupo que se reduce a entre uno y tres de cada 10 alumnos que logran acceder al nivel avanzado, salvo en Matemática de 5°/6° año en secundaria, donde casi la mitad de las jurisdicciones del país no cuentan con estudiantes en ese nivel.
Otro ejemplo es la disminución del porcentaje de estudiantes en el nivel más alto de la prueba. En todas las asignaturas y grados/años, con excepción de lengua en 5°/6°, el porcentaje de estudiantes que logra aprendizajes avanzados es más bajo en 2023 (para primaria) y 2022 (para secundaria) en comparación con 2016.
La cuestión socioeconómica, otro factor que agrava la situación
En un país con más de la mitad de su población en situación de pobreza, este es otro factor que siempre genera datos duros y preocupantes en cuanto a los rendimientos escolares.
Si se considera el nivel socioeconómico, la brecha entre los estudiantes más pobres y los más ricos en el nivel avanzado es la más amplia de todas, aunque se está reduciendo.
En este análisis, la brecha por nivel socioeconómico es la más extrema, con diferencias de entre 17 y 40 puntos, aunque se ha reducido en la mayoría de las asignaturas y grados/años.
Los estudiantes de sectores más desfavorecidos son considerablemente más propensos a obtener resultados bajos en la prueba en comparación con los más ricos en todas las materias y niveles.
El porcentaje de estudiantes más pobres con bajo desempeño aumentó en Lengua y Matemática, salvo en Lengua de 5°/6° año.