Las Abuelas volvieron una vez más a tender puentes y demostrar, como dice Estela de Carlotto, que cuando hay unidad nada es imposible. Después de mensajes cruzados por el cierre de listas del Partido Justicialista (PJ), Cristina Kirchner y Axel Kicillof volvieron a encontrarse en público. La ocasión lo ameritaba: las Abuelas de Plaza de Mayo celebraron sus 47 años de lucha en el Teatro Argentino de La Plata. “La patria es de todos y tenemos que defenderla sin diferencias”, dijo Estela mientras hacía que todos la acompañaran en el escenario.
La sala Alberto Ginastera del Teatro Argentino es enorme. Sus butacas no alcanzaron para contener a todas las personas que querían acercarse a saludar a las Abuelas por los 47 años que llevan recuperando identidades.
Pasadas las 20, el público estalló al ver que ingresaban Estela de Carlotto, CFK y Kicillof.
–¡Cristina presidenta!– coreaban.
–¡Axel, querido, el pueblo está contigo!– le cantaban al gobernador.
En la primera fila, CFK se acomodó al lado de Taty Almeida, la referente de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora. Estela se ubicó entre CFK y Kicillof. Al lado suyo estaba Buscarita Roa, la vicepresidenta de Abuelas.
El cierre del evento –plagado de emociones– quedó en manos de Estela, que llamó a la unidad y a que todos pensaran qué podían hacer por la Patria. “Nada está perdido si seguimos luchando juntos”, dijo.
Después de una foto de familia, la presidenta de Abuelas le cedió la palabra a CFK que dijo que al ver a los nietos veía a Néstor Kirchner. “La vida hay que celebrarla y tener memoria. Los que quieren que nos olvidemos es porque nos quieren joder en el presente. No lo vamos a permitir”, prometió CFK.
A su turno, Kicillof dijo que no había mejor lugar para celebrar a las Abuelas que en una sala recuperada de la desidia de la derecha. “Memoria, Verdad y Justicia. Son 30.000”, gritó.
Minutos antes del inicio del acto, el gobernador bonaerense, había apuntado directamente contra Javier Milei por haber dicho que su “morbo” es “ponerle el último clavo al cajón del kirchnerismo, con Cristina adentro”. “No es inocente, no es casualidad”, resaltó. “Es vomitivo, es espantoso que eso provenga de un presidente. Sobre todo cuando sabe que a Cristina la quisieron matar. Promueve la violencia”, fustigó.
La celebración de la unidad
Las sonrisas de los nietos desbordaban sus caras. Victoria Montenegro, Guillermo Pérez Roisinblit, Adriana Metz, Jorge Castro Rubel, Belén Altamiranda, Guillermo Amarilla Molfino, Ezequiel Rochistein Tauro, los hermanos Miguel y Daniel Santucho y Horacio Pietragalla Corti estaban en los primeros lugares. Cerca se encontraba el senador Eduardo “Wado” de Pedro, que despertó la primera ovación al ingresar en la sala.
En el escenario se leía “Abuelas es identidad. 47 años de lucha”. Quienes subían y bajaban del escenario eran dos nietos, Leonardo Fossati y Manuel Goncalves Granada, un dúo consolidado a la hora de animar los eventos de las Abuelas y de emocionar con lo conseguido en estas casi cinco décadas.
Durante más de dos horas, hubo música, teatro y videos para recordar a quienes ya no están. También para dar cuenta de las luchas que se libraron contra el gobierno de Javier Milei –por ejemplo, para evitar que con la Ley Bases se llevara puesto al Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG).
De Diputados llegó una comitiva integrada por Cecilia Moreau, Leopoldo Moreau y Paula Penacca. Ya estaba sentado parte del gabinete bonaerense –Carlos Bianco (Gobierno), Juan Martín Mena (Justicia), Walter Correa (Trabajo) y Gabriel Katopodis (Infraestructura)– junto al senador nacional Oscar Parrilli. Matías Moreno, subsecretario de Derechos Humanos provincial, era uno de los que más se movían por la sala.
Las Abuelas agradecieron particularmente el apoyo que les dan desde la Provincia y las intendencias. Estela le pidió, entre otros, a Julio Alak, intendente de La Plata, que las acompañara en el escenario. Hubo también mensajes de gratitud hacia los sindicatos y representantes de las embajadas, que colaboran para sostener la lucha del organismo frente al desfinanciamiento del gobierno de Milei.
Abrazarlos a los dos juntos
Los últimos días fueron tensos en el peronismo. Estela de Carlotto, que cumplió 94 años el martes, era bien consciente de esa tensión. Habló con CFK y con Axel. Les pidió que las acompañaran en la celebración de los 47 años de lucha. Les dijo que quería abrazarlos a ambos. Y el mensaje de las Abuelas llegó. Otra vez.
El vínculo entre CFK y su histórico aliado, Kicillof, quedó resentido tras el cierre de listas para la conducción del Partido Justicialista. CFK dijo que se sentía dolida porque el gobernador no especificaba si acompañaba su lista o le daba aire a la del riojano Ricardo Quintela.
Kicillof contestó entonces que tenía a Cristina en el corazón y llamó a dejar de lado la lógica de los traidores dentro del peronismo. Lo que pareció aquietar más los ánimos paradójicamente fue la intervención de Javier Milei en la que dijo que quería poner el último clavo del cajón del peronismo con Cristina adentro. El gobernador bonaerense respondió rápido. Calificó el comportamiento de Milei como “gravísimo, nefasto e indigno para un presidente” y afirmó que sus dichos eran incompatibles con la democracia.
Tanto CFK como Kicillof tienen una relación muy cercana con las Abuelas. El gobernador les ofreció el Teatro Argentino de La Plata para que celebren sus 47 años de existencia y de búsqueda –que permitió restituir las identidades de 137 bebés, niños y niñas arrebatados por el terrorismo de Estado.
“Vamos a seguir”
Abuelas de Plaza de Mayo se convirtió en un blanco de los ataques del gobierno de La Libertad Avanza (LLA). La medida más directa fue el desmantelamiento de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi) al eliminar por decreto la Unidad Especial de Investigación (UEI) que funcionaba desde 2004 al interior de este organismo estatal. Con esa decisión, Milei le impide a la Conadi hacer investigaciones para encontrar a los nietos y a las nietas que buscan las Abuelas y acceder a todos los archivos en poder del Estado.
Horas antes de que comenzara el festejo en La Plata, Estela de Carlotto dijo que las ofensas del Presidente le parecen inaceptables. “Es un momento difícil para el país, Milei tiene un ensañamiento. Las Abuelas de Plaza de Mayo estamos muy castigadas por este gobierno. No tenemos ninguna ayuda económica para poder seguir la búsqueda de los nietos. Lleva mucho dinero realizar esta búsqueda. Hay intendentes que nos ayudan, pero es difícil”, dijo en El Destape Radio.
Kicillof tiene previsto hacer anuncios para apuntalar la lucha de las Abuelas que el gobierno nacional socava, según pudo saber Página/12. Esta semana, la subsecretaría de Derechos Humanos bonaerense llevó a cabo distintas charlas con nietos que restituyeron su identidad en los sitios de memoria que funcionan en la provincia. El gobernador se reunió con Estela de Carlotto semanas atrás y se comprometió a poner en marcha una unidad de investigación para encontrar a los bebés robados durante la dictadura.
Más allá de las avanzadas negacionistas, las Abuelas y los nietos inyectaron una estela de esperanza. “Voy a seguir”, prometió Estela. “Que 94 años no es nada y es febril la mirada”, bromeó. Y todos rieron con ella para desafiar juntos el odio y el olvido.