24 noviembre, 2024

Alumnos proponen reciclar cinturones de seguridad y transformarlos en correas para la Sociedad Protectora de Animales

La iniciativa surgió en la escuela Benito Garat de nuestra Ciudad, en conjunto con un desarmadero de autos y la entidad protectora. El proyecto está siendo trabajado en un taller en el que participan alumnos de quinto y sexto grado.

El docente a cargo del taller de Tecnología, Matías Walter, explicó que “la iniciativa surgió de una conversación que tuve con Mariano Bonato, el dueño del desarmadero ecológico Grand Parts, que me contó de toda una serie de autopartes a las que busca reutilizar o descartar de una manera consciente”.

Fue entonces cuando “me cuenta que tiene una cantidad impresionante de cinturomes y surge la idea de reutilizarlos, primeramente haciendo correas y collares para aprovechar el material”, mencionó Matías.

El docente trajo a colación que “todos los años participamos de la Feria del Ambiente que hay en Concordia”, de allí comenzó a tomar fuerza la idea de “hacer un proyecto con los gurises y que con un proyecto tecnológico, la sociedad protectora aprovecharía los collares y el desarmadero podría deshacerse de ese residuo con el que no sabe qué hacer”.

Por lo pronto, apuntó que “el proyecto todavía está verde, porque empezamos hace un mes y algo”, pero “lo queremos encarar para después de las vacaciones de invierno, donde se viene la Feria de la Educación, la más importante de la que podamos participar acá en Concordia y que, si ganamos, nos da pie para viajar a otros lados”. Además, comentó que “la idea es que, cuando hagamos una serie grande de cinturones, podamos donarlos” a la Sociedad Protectora de Animales y otras entidades mascoteras.

En cuanto a la fabricación de este tipo de productos, subrayó que “nos encontramos con el problema de elaborar la hebilla” para las correas y los cinturones, teniendo en cuenta que “nos salía más de 1000 pesos cada una, por lo que buscamos la forma de fabricarla nosotros mismos”.

También contó que para la elaboración “compramos agujas para bordado anchas, hilo encerado, con lo que las nenas se pusieron a hacer en la escuela y en un ratito, de un cinturón de 3 metros de un auto, sacaron unos 6 collares de perro”.

Sobre los alumnos, precisó que “tienen entre 10 y 11 años” y recordó que “la escuela Benito Garat es una escuela NINA, por lo que trabajan en doble jornada: a la mañana tienen grados comunes y a la tarde tienen talleres, o al revés en el caso de los que cursan en horario tarde”.

Según las palabras del docente, este tipo de escuelas “apuntan a comunidades vulnerables y tienen doble jornada para que los niños estén alejados de la calle, que tengan contenido en las escuelas”, por lo que “todos los años pensamos propuestas así para hacer más llevadero el año, tener un objetivo”.