El exgobernador Sergio Urribarri puso a disposición su renuncia a las embajadas argentinas en Israel y Chipre tras conoccerse la condena a 8 años de prisión en el megajucio de corrupción. El presidente Alberto Fernández aceptó la dimisión del entrerriano.
De ese modo, Urribarri dejará su cargo en ambas representaciones argentinas en el extranjero a la espera de lo que resuelva la Cámara de Casación respecto a la condena de este jueves.
Urribarri fue condenado en un veredicto histórico del Tribunal compuesto por José María Chemez, Elvio Garzón y Carolina Castagno. La decisión fue unánime y en lo que fue tan sólo el adelanto de la sentencia, Chemez leyó la resolución en más de 12 horas durante la jornada de este jueves. La pena deberá ser efectiva una vez confirmada la condena.
La decisión judicial también alcanzó al cuñado de Urribarri, Juan Pablo Aguilera con una pena de prisión de 6 años. Misma pena que tuvo el exministro de Cultura y Comunicación de la gestión urribarrista, Pedro Báez.
Los jueces también encontraron culpable a Luciana Almada -pareja de Juan Pablo Aguilera- a una pena de 2 años y 6 meses de prisión condicional. Su hermano, Alejandro, fue uno de los 5 absueltos junto al exministro de Turismo Hugo Marsó, Gustavo Tórtul, Maximiliano Sena y Hugo Céspedes.
El resto de los condenados por el Tribunal son la contadora Corina Cargnel a 3 años, Gustavo Tamay a 3 años, Emiliano Giacopuzzi a 2 años y 6 meses, Germán Buffa 1 año y 2 meses y a Gerardo Caruso a 3 años. Todos con prisión condicional.