Los controles de velocidad por medio de radares habían desaparecido del Departamento de Concordia por el descontento del ciudadano en general, ya que presentaban irregularidades desde la instalación hasta el ´pretendido´ cobro. No obstante, regresó la cámara oculta !!!
En el Departamento de Concordia el radar está ubicado en la Autovía Gervasio Artigas, mano Sur a Norte, en el Kilómetro 245 –Estancia Grande- a la salida de una curva, lo cual es una acción deliberada casi delictual que tiene una clara intención de sorprender al conductor/contribuyente y asegurarse una multa con la consiguiente recaudación.
Sin embargo, Concordia 345 detectó otras irregularidades como el cartel que indica la presencia de un radar, se encuentra disimulado entre el pastizal de la banquina. Imposible de ver para los conductores.
La conclusión es que la instalación del radar tiene fines meramente recaudatorios y no una acción de gobierno que pretende la seguridad del ciudadano y la prevención de la siniestralidad vial.
EL COLMO
Como si fuera poco y muy por fuera del sentido común o de cualquier reglamento establecido, los conos que indican la presencia de un obstáculo (vehículo-radar) se encuentran junto al móvil policial.
Esto manifiesta una falta gravísima ya que, según lo establecido, el primer cono debe ubicarse a 120 metros del radar, para que el conductor logre tomar las precauciones del caso. El cálculo que se hace es un metro por cada kilómetro de velocidad permitida, en este caso puntual es de 120 kilómetros por horas. No debemos perder de vista, que el lugar donde se encuentra apostado el vehículo-radar en una vía de escape de los vehículos que presentan alguna dificultad en la circulación.
Entonces, ¿Por recaudar fondos, se pone en riesgo la vida de la gente? Pareciera que la respuesta es afirmativa, puesto que corren peligro los conductores y los agentes apostados a la vera de la ruta.
Las estadísticas son indiscutibles y marcan que la temporada de verano dejó un sinnúmero de accidentes a lo largo de la Autovía Gervasio Artigas o Ruta N° 14. Sin embargo, no son exclusivamente producto de la alta velocidad, sino de una sumatoria de factores como el deterioro de la cinta asfáltica -baches y ondulaciones-, escasa señalización –vertical y horizontal-, guardarails destruidos, altura de la maleza, la ocupación ilegítima de las vías de escape, por locales comerciales, cartelería atc etc.
¿El contribuyente debe soportar el pillaje de las cabinas de peaje y de los radares que pone la Policía Provincial? ¿Hasta cuándo?
Concordia345 / concordia1021digital