El ajuste para la facturación de la categoría más alta es de 32% desde el 1° de enero de 2022, cuando la inflación será de 52%. Más contribuyentes deberán pasar al régimen general
El Gobierno nacional incrementó la presión impositiva sobre los monotributistas con aumentos en las escalas de facturación por debajo de la inflación en las cuatro categorías superiores.
Esta situación provoca que mayor cantidad de contribuyentes esté en riesgo de superar el tope para mantenerse en el sistema simplificado y deba pasar al régimen general.
La Administración Federal de Ingresos Públicos publicó este lunes las nuevas escalas de facturación y los valores a pagar correspondientes a cada mes desde el 1° de enero de 2022.
De esta forma se observó que la categoría más alta “K” tendrá un máximo de facturación anual de $4.662.015,87 lo que representa un alza de 32% respecto al valor del 1° de enero de este año. Por tanto, la diferencia con la inflación es de casi 20 puntos. Sin embargo, el valor mensual a pagar aumentó 70% a $25.090, aumentando el stress financiero sobre ese conjunto de contribuyentes.
En la categoría subsiguiente, “J”, el tope de facturación sube 32% a $4.202.114,31 y el valor mensual también crece 70% hasta $22.197.
En la categoría “I” se repite el mismo esquema con facturación en $3.666.612 (+33%) y valor mensual de $19.328 (+70%). Y lo mismo en la “H” con $3.276011 y $13.445,60.
La situación cambia desde la categoría G con aumento de facturación de 56% a $2.646.009 y cuotas mensuales de $7.772.(+70%).
Para la “F” los valores son $2.205.007 (56%) y $6.825,92 (70%)
Para “E” los valores son $1.764.006 (56%) $5.936,55 (70%).
Para la “D” los valores son $1.335.604 (57%) y $4.907,34 (70%9
Para la “C” los valores son $970.203 (72%) y $4.190,06
Para la “B” los valores son $693.002,36 (71%) y $3.728,29
Para la “A” los valores son $466.201,59 y $3.334,24.
Desde el Gobierno justificaron la metodología con la que se actualizaron las tablas. Se explicó que en el primer semestre se tomó una tabla con cifras ajustadas al 35% con relación a 2020 (vinculada a la movilidad jubilatoria de ese año) y otra para el segundo semestre que incluyó un incremento extraordinario en los montos de facturación por una ley del Congreso Nacional.
Si se comparan con los valores que regirán a diciembre los aumentos en promedio en todas las categorías serán del orden de 26%. La diferencia queda establecida por lo que sucedió en la primera parte del año.