El mes de abril es un mes particular para Salto Grande, significa algo más que un aniversario, es el legado de quienes visionaron, proyectaron y construyeron una obra que marcaría la región.
Un visionario es aquella persona que reúne conocimientos, imaginación y creatividad para proyectar algo que ocurrirá en el futuro. Podríamos decir que Don Gregorio Soler fue quien hace ya más de 120 años imaginó transformar la región con una obra que incluiría a dos países como protagonistas.
La idea era la obtención de mayores beneficios de las disposiciones naturales que ofrecen los rápidos del río Uruguay, en la zona de Salto Grande, para el desarrollo regional de ambos países. Esta gran obra comprendía la realización de una represa hidroeléctrica que beneficiara a la Argentina y el Uruguay en partes iguales.
En el año 1946 se firmó el convenio binacional que tiene por objeto “obtener el mayor beneficio de las disposiciones naturales que ofrecen los rápidos del río Uruguay, en la zona de Salto Grande […] aprovechar sus aguas para la producción de energía, y facilitar las comunicaciones terrestres, así como cualquier otro objeto que, sin menoscabo de los anteriores propósitos, concurra al enunciado beneficio común”.
Con el proyecto establecido, se fecha el primer día hábil de abril del año 1974 para dar inicio a una de las obras que es atravesada por más de un siglo de historia.
“En un día emblemático para Salto Grande, queremos reconocer a todos quienes nos antecedieron, e hicieron que esta obra de singular importancia para la zona sea hoy una realidad. Nuestro homenaje a quienes, con espíritu emprendedor y visionario, encabezaron los movimientos populares, técnicos y políticos que concibieron y apoyaron la idea de aprovechar las condiciones naturales que ofrecían los rápidos del río Uruguay, para el desarrollo económico, industrial y social de ambos países.
Seguiremos poniendo toda nuestra energía para lograr el desarrollo integral de la región, tal como los gobiernos -y sobre todo- los pueblos quisieron”, declaró el Dr. Carlos Albisu, presidente de la Delegación del Uruguay.
“Un aniversario más de la puesta en marcha de una obra de suma trascendencia para las ciudades de Concordia, Salto, Federación, la Región y ambos países. Salto Grande es parte de la historia, de nuestra identidad, pero también del presente y futuro de cientos de familias. Nació como una idea, se consolidó con apoyo de las fuerzas vivas y fue defendida por éstas cuando estuvo en riesgo; hoy nuestro compromiso es seguir honrando esa historia en pos de poder cumplir cabalmente aquellos principios y valores que dieron el marco para que hoy Salto Grande sea una realidad que seguimos construyendo día a día” manifestó el Ing. Luis Benedetto, presidente de la Delegación Argentina.
El 1° de abril de cada año conmemoramos el inicio de las obras de ingeniería que dieron origen a la Central Hidroeléctrica de Salto Grande, una obra que transformó una región y dos países.