El fenómeno climático conocido como “La Niña”, que genera sequía, comenzó a mostrar sus efectos en la región, por lo que sus consecuencias en las siembras y cosechas de Entre Ríos en el ciclo 2020/21 presentan gran “similitud” con la temporada 2008/2009, aseguró la Bolsa de Cereales de la provincia.
La precipitación acumulada en Entre Ríos desde enero a octubre de 2008 fue de 600 milímetros, un 25 por ciento menos que el promedio histórico; mientras que entre los mismos meses del 2020 fue de 630, un 21 por ciento menor.
Además, la Bolsa entrerriana remarcó “el agravante” de que octubre aportó “sólo el 50 por ciento” de los milímetros normales, y que “La Niña” genera una reducción para los meses de noviembre, diciembre y enero.
A través de su sistema de información (Siber), el organismo sostuvo que en ambas temporadas se apreció una “expansión de la sequía” en el territorio provincial, “mucho más notoria” en el 2020 debido a las escasas lluvias de octubre.
En ese sentido, estima “un escenario muy complicado” para todos los cultivos de cosecha gruesa.
“La Niña”, que estará al menos hasta febrero del 2021, generará “un mayor enfriamiento del Océano Pacífico ecuatorial central” con una naturaleza “moderada a fuerte”.
Por otro lado, la entidad bursátil detalló que en los últimos 12 años se registraron cinco de estos eventos, que provocaron un promedio de rendimiento de soja en esos cinco años de 1.850 kilos por hectárea; y de 4.600 kilogramos por hectárea de maíz.
Ambos rendimientos están por debajo del promedio del último lustro, de 2.100 y de 6.400 kilos por hectárea, respectivamente.
Finalmente, la Bolsa señaló que para cubrir los costos, los productores deberán producir 1.800 kilogramos de soja por hectárea; y de 3.800 kilos por hectárea de maíz, informó AIM.