“En los últimos días mantuvimos una serie de reuniones con el equipo del Instituto Municipal de Viviendas y Tierras, la Dirección de Seguridad y nuestros asesores legales. Planteamos como objetivo fortalecer la prevención de usurpaciones y actuar con mayor dureza si se presentan este tipo de situaciones”, reveló esta mañana el intendente Alfredo Francolini en declaraciones radiales.
“Desde el municipio trabajamos en conjunto con la Policía y la Justicia. Principalmente, controlamos y prevenimos las usurpaciones. Y cuando ocurren, ponemos en marcha de inmediato el correspondiente protocolo para desactivarlas y tomar medidas con quienes las impulsan”, remarcó el Intendente.
“En Concordia desarrollamos políticas públicas que articulamos con Nación y Provincia para facilitar el acceso de la población a viviendas y tierras, principalmente en los sectores más vulnerables. Entendemos que detrás de las usurpaciones puede haber una necesidad real, un problema social. Pero el déficit habitacional que padece todo el país no es un justificativo para actuar por fuera de la ley”, advirtió el jefe comunal.
El usurpador siempre pierde
“El que usurpa un terreno tiene que ser consciente que comete un delito penado por ley. Que además su nombre queda asentado en las bases de datos con las que trabajamos y luego no tienen derecho a acceder a programas de viviendas ni a la adquisición de terrenos en el Banco de Tierras. Pero además van a perder también los beneficios sociales que perciban o cualquier ayuda social que les brinde el municipio. En esto estamos trabajando también con el Concejo Deliberante y reajustando nuestros protocolos para endurecer aún más la lucha contra las usurpaciones”, detalló Marina Peñaloza, directora del Instituto Municipal de Tierras y Viviendas.
“El usurpador siempre pierde, siempre hay consecuencias tanto para los que usurpan como para los que promueven este tipo de acciones. Eso es algo que debe estar claro, para que nadie piense que si hay un terreno abandonado o descuidado puede ir a meterse por la fuerza y quedarse ahí. Suponer que se puede hacer eso y no pasa nada es un error muy grave que perjudica al usurpador y a toda su familia”, concluyó la titular del organismo municipal que coordina las políticas de hábitat y ordenamiento territorial.